Los conflictos armados, la violencia y los desastres naturales causaron más de nueve millones de nuevos desplazados en el mundo en la primera mitad de este año, según datos publicados hoy por el Centro de Seguimiento del Desplazamiento Interno.

De todas esas víctimas, 4,6 millones huyeron a causa de un conflicto, con lo que se alcanzó en solo seis meses la cifra a la que se llegó en septiembre del año pasado.

La República Democrática del Congo (RDC), cuya región central de los Kasai se ha convertido en un nuevo foco de violencia, es el país que ha generado más nuevos desplazados, prácticamente un millón en los primeros seis meses del año.

Con estos movimientos de población, el número total de desplazados es de 3,7 millones en la RDC, que sufre la peor situación de África al respecto y donde el conflicto se ha expandido a ocho de las veintiséis provincias del país.

En Irak, donde una prolongada ofensiva militar consiguió la liberación de Mosul después de tres años bajo control del grupo yihadista Estado Islámico (EI), hubo 992.000 desplazados internos.

Esta organización sobre desplazamiento interno, creada por el Consejo Noruego de Refugiados, considera en su análisis que la amplia destrucción que ha sufrido la ciudad retrasará considerablemente el retorno de los que tuvieron que escapar.

Más recientemente, los combates en Kirkuk entre el Ejército iraquí y el EI, que mantiene el control sobre áreas de esta provincia, han llevado al desplazamiento de otras 37.000 personas.

Mientras, en Siria se registraron 692.000 desplazados, pues, a pesar de varias tentativas de alto el fuego negociadas por distintos actores, se intensificaron los enfrentamientos entre fuerzas gubernamentales y rebeldes.

Asimismo, la ofensiva contra el Estado Islámico continúa en Al Raqa, ciudad del norte de Siria que el grupo terrorista declaró la capital de su autoproclamado califato.

Según el Centro de Seguimiento del Desplazamiento Interno, Filipinas es el cuarto país con la situación más grave al respecto, con 466.000 casos debido al conflicto en la isla de Mindanao, y dentro y en los alrededores de la ciudad de Marawi, de donde habrían salido 350.000 personas.

Siguen en la lista de países con las cifras más altas de nuevos desplazamientos entre enero y junio Etiopía (213.000), República Centroafricana (206.000), Sudán del Sur (163.000), Gambia (162.000), Afganistán (159.000), Nigeria (142.000), el Yemen (112.000) y Somalia (70.0000).

Por otra parte, 350 desastres, de menor o mayor intensidad, causaron 4,5 millones de nuevos desplazados y, aunque esta cifra sólo representa la mitad de lo que se registraba el año pasado para el mismo periodo, la organización pidió no minimizar su gravedad.

Y es que la temporada en la que suelen producirse tormentas inesperadas e inundaciones en el sur y sureste de Asia todavía no ha empezado, como tampoco el periodo de huracanes en el continente americano.

"Por consiguiente, estos números pueden aumentar exponencialmente, como en años anteriores", advirtió el centro.

Las situaciones más graves se dieron por inundaciones en China y por un ciclón en Bangladesh.

También se registraron importantes desplazamientos en Filipinas, Perú y Sri Lanka, en el contexto de inundaciones de temporada.

"Esto nos muestra que los patrones previsibles del clima pueden causar elevados números de nuevos desplazamientos año tras año, lo que a su vez indica que no se está invirtiendo lo suficiente en reducir la vulnerabilidad de las poblaciones", comentó la responsable de la investigación, Bina Desai.

EFE